Juan Ignacio Peinado Gracia en el Club del Escenario.
Juan Ignacio Peinado Gracia es Catedrático de Derecho Mercantil en la Universidad de Málaga y un reputado abogado experto en asesoramiento estratégico en materias corporativas. Ha sido Decano de la Facultad de Ciencias Sociales y Jurídicas de la Universidad de Jaén y profesor, no sólo en la Universidad de Málaga, sino también en la de Jaén y Granada. Fue Director de la Cátedra Antonio Flores de Lemus de Economía del Sector Público y Derecho Económico del Institudo de Estudios Fiscales del Ministerio de Hacienda. Además, ha sido también Socio Director del Departamento Mercantil de Cremades&Calvo-Sotelo Abogados y, desde hace unos años, es consejero del Consejo de administración de la productora audiovisual Vértice 360º. Actualmente, compagina estas labores con la de responsable de la división de Cumplimiento, Mercados y Comunicación en Carbures Europe. Con una amplia carrera como docente y jurista, participa en diversos postgrados, conferencias e investigaciones no sólo nacionales sino también con Universidades latinoamericanas y europeas. En su amplia trayectoria profesional, ha publicado más de cien trabajos científicos en Alemania, España, Italia, Uk, USA, entre otros países e, igualmente, ha sido director y coordinador de diversas obras colectivas. Cabe destacar sus aportaciones en los Manuales clásicos de Derecho Mercantil (base jurídica para estudiantes) y las realizadas en otras obras de referencia para profesionales del derecho. Una extensa obra que recoge estudios con una variada temática mercantil que engloba diversas ramas del derecho de sociedades, derecho aéreo, protección del consumidor, competencia y publicidad… Ha realizado investigaciones en centros e instituciones de reconocido prestigio, es responsable principal de grupos de investigación así como miembro de proyectos de investigación de excelencia y miembro, también, de diferentes asociaciones relevantes dentro del panorama jurídico y académico.
Como hiciera Dostoievski en su novela «El Idiota», Juan Ignacio Peinado Gracia se hace el mismo planteamiento que el ateo Hippolit «¿Qué belleza salvará el mundo?» como si él también se dirigiera al príncipe Myskin y, con estas reflexiones, nos abre los ascesis de su mente en El Club del Escenario.
Nada Personal sobre Juan Ignacio Peinado Gracia:
1.- Leño, grupo legendario por excelencia, titulaba una canción “Maneras de vivir”. ¿Cuál es su manera de vivir día a día?
La respuesta más inmediata es: corriendo. Vivo corriendo. Entre Madrid, el Puerto de Santa María y Málaga. Intentando compatibilizar la vida profesional y la personal. A veces confundiéndolas o, al menos, solapándolas. La lectura más inmediata de eso es negativa pero, sin embargo hay, en mi opinión, también un imperativo moral que me lleva a intentar trabajar cuanto puedo. La negación del ocio poniendo a trabajar los talentos. Aunque en el fondo uno siempre aspira a otra vida. Como en la canción de Leño: “Voy aprendiendo el oficio olvidando el porvenir. Me quejo sólo de vicio. Maneras de vivir».
2.- Munch gritó al mundo con su obra “El Grito”. ¿Cuál sería su grito al actual mundo, qué le gritaría?
“El grito” son cuadros que expresan angustia y desesperación. Y eso desgraciadamente es actual. La mayor parte de la humanidad vive en la miseria con su propia supervivencia amenazada. Miramos hacia atrás y la situación no es nueva y no alcanzamos a comprender cómo ha podido suceder. Y, sin embargo, nos negamos a considerar nuestro mundo como una responsabilidad propia. Nos negamos a ver en cada semejante como un igual, una misma naturaleza con la que nos identificamos. Esa igualdad esencial está por encima del sexo, raza, religión, nacionalidad, clase social, etc. Y cuando nos negamos a mirar a la desgracia, a la desigualdad, al genocidio, negamos nuestra propia naturaleza. Así que el grito sería algo así como: “¡Mira a tu alrededor, no apartes la mirada y, si algo necesita cambio: cámbialo!”
3.- Lo que el viento se llevó… es un clásico del cine pero: ¿Qué se llevo el viento cuando le llegó la fama o el reconocimiento?
Esta pregunta no aplica. Mi mundo no es de fama y el reconocimiento es algo íntimo. No hay cambios. Pero llevo muchos años en lo mío y me gustaría pensar que nada se ha quedado en el camino. Por más cosas que haga lo que yo soy es un profesor de Universidad y lo cierto es que, después de veinticinco años en esto, sigo poniéndome nervioso antes de cada clase, cada conferencia o cada ocasión.
4.- El Guernica, Picasso; escenificaba una gran tragedia/catástrofe. ¿Existe un Guernica actual en nuestra sociedad? De haberlo, ¿cuál pintaría?
En muchas ocasiones necesitamos imágenes, iconos, para ser conscientes de lo que pasa. La evolución de los medios de comunicación permite que hoy cualquier hecho pueda ser visto de inmediato. Y, por el contrario, no tenemos sensibilidad hacia lo que no vemos. Hace unas semanas era la foto del niño Aylan muerto en una playa o hace unos meses los inmigrantes aupados en la valla de Melilla mientras a este lado unas personas jugaban al golf. Ambos son cuadros de nuestro drama. La diferencia es que seguimos teniendo presente el drama que subyace en el Guernica y nos previene contra su repetición; mientras que ya no sabemos quién era Aylán.
5.- Parafraseando a Los Secretos: ¿Cuál es la buena chica/el buen chico de su vida?
La que, como al zorro, me domestica cada día.
6.- Goya, al final de sus días, plasmó en su obra “Aún aprendo”, todo un alegato de un grande sobre el conocimiento. Usted: ¿de qué o quién aprende?
Pues de todo el mundo. En el fondo mi profesión es esa. Los académicos tenemos fama de soberbios pero no es así. El verdadero académico necesita esencialmente de la humildad para estar en disposición de aprender. Aprendes en los libros y también en el intercambio con cuantos te rodean. Aprendí de mis maestros, de mis compañeros, de mis alumnos y, especialmente, siempre y todo, de quien amo.
7.- El Padrino III, esgrimía una visionaria frase: ¿O imperecedera en cualquier tiempo?… “Cuanto más alto subo más mierda encuentro”: ¿Se ajusta a nuestra actualidad política?
No creo que sea justo considerar por sistema que todos los que ocupan posiciones predominantes en las organizaciones son por eso mismo la hez humana. Es más, si fuese una ley inmutable, no tendría sentido valorarlo en la actualidad o en otra referencia temporal. Dicho eso, mi opinión de la actual clase política es verdaderamente mala.
Algunos elementos de la transición política han derivado en fallos estructurales de nuestro sistema político y de la sociología política española. Por decirlo de alguna manera, la democracia está, en mi opinión, secuestrada por los partidos políticos. La sustitución de las estructuras políticas del franquismo por los partidos, el crecimiento de los mismos y la confusión de poderes del Estado, ha generado en éstos una burocracia que ocupa no sólo la estructura de los partidos sino del propio Estado. La eficacia de la maquinaria de los partidos exige bajos niveles de democracia interna, por lo que sus burocracias tienden a sustituir legitimidad por eficacia y a perpetuarse.
Si observamos a quienes ocupan el poder, en muchas ocasiones descubriremos personas sin preparación alguna, sin experiencia, personas a las que nunca les confiaríamos la gestión de nuestros negocios particulares, pero a los que si les entregamos la gestión de los millonarios presupuestos de concejalías, ayuntamientos, diputaciones, comunidades autónomas….El cursus honorum del servicio público no es la consagración de una vida profesional de éxito, sino la sustitución de esa vida profesional. De esta forma, el propio sistema incentiva que el poder sea detentado por la burocracia de los partidos.
No creo que sea así sólo en los partidos tradicionales. Lo que ha pasado en el último año con Podemos demuestra, en mi opinión, que es un problema estructural de nuestros sistema político. Y, sin embargo, no parece que sean los propios partidos los que vayan a cambiar esto.
El gusto por el liderazgo, la ausencia de mecanismos alternativos de participación política o el carácter socialista de todos los partidos (de izquierda y derecha) son también elementos definitorios y de interesante análisis, pero eso será otro día porque me estoy enrollando mucho en esta pregunta.
8.- Manolo Tena escribió y cantó… “Si todos no han muerto hay alguien que sueña”: ¿Qué podemos esperar nosotros mismos de esta sociedad? ¿Se ha perdido toda Fe? ¿Algún vivo en la sala? Usted está muy vivo… ¿su sueño?
Pues no sé si debemos esperar de la sociedad como conjunto o si debemos concentrarnos en esperar algo de nosotros mismos. Quizás que nos sintamos responsables de nuestras vidas, de nuestro entorno; que no esperemos que las cosas sucedan, sino que las hagamos. Mira, me preguntas por un sueño, y hace dos mil años que lo tenemos sintetizado de forma perfecta. No sé si todos, pero la inmensa mayoría de los españoles hemos rezado alguna vez el Padrenuestro. Pues en esa sencillísima oración se contienen siete peticiones o deseos: un sueño en su conjunto.
9.- La Divina comedia de Dante, se divide en tres partes: ¿Cuál sería su infierno? ¿Su purgatorio? ¿Su paraíso?
¿Infierno, purgatorio, paraiso? Los tres conviven pero, como es una Commedia, acaba bien.
10.- Hágase una pregunta, por favor. ¿Nos la contesta?
Teniendo en cuenta que esta entrevista la hacemos en Navidad, la pregunta a la que estos días le doy vueltas es ¿qué es para ti la Navidad? Y la respuesta que hoy yo tengo es “el renacer a la felicidad de saberme amado por Dios”.
Un poco más sobre Juan Ignacio Peinado Gracia...
Tratado de Derecho de Cooperativas, Juan Ignacio Peinado Gracia (dir.), Patricia Márquez Lobillo (coord.).
El accionista minoritario en la sociedad cotizada, Juan Ignacio Peinado Gracia (dir.),Javier Cremades (dir.), Marta Zabaleta (coord.)
Nuevos enfoques del Derecho aeronáutico y espacial, Juan Ignacio Peinado Gracia (dir.).
+Info: Artículos y bibliografía completa del Profesor Juan Ignacio Peinado Gracia en Dialnet.
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Fotografía de portada cedida por el entrevistado.
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